El Banco Central de la República Argentina subió nuevamente las tasas de interés y el nuevo piso para los plazos fijos quedó en 41,5% anual a 30 días, con un rendimiento efectivo anual de 50,4%. A su vez, a excepción del dólar oficial que sube de a centavos pero sostenidamente, los dólares alternativos cayeron durante varias rondas consecutivas: el blue fue bajando de $1 o sosteniendo su valor hasta llegar a los $211 y los dólares financieros siguen en baja (el MEP operaba cerca de los $201 y el Contado Con Liquidación se cambiaba a $206,93). Se alejan los fantasmas de la devaluación brusca, ¿pero seguirá la calma cambiaria?
Durante un año la tasa de interés de referencia estuvo quieta, pero como la inflación no sólo no bajó, sino que subió durante el 2021, y se prevé que lo siga haciendo en el corriente año, el Banco Central la subió dos veces en lo poco que va del año aspirando a que los ahorristas se vuelquen al plazo fijo y no a dolarizar sus activos. En paralelo, el dólar oficial sube (2,2% en enero y a un ritmo de 2,7% en febrero) y achica la brecha con las cotizaciones paralelas.
La nueva tasa anual efectiva (50,4%) se acerca pero no alcanza a igualar a la inflación de 2021 (50,9%) y queda por debajo de las estimaciones del 54% de inflación que se prevé para el país en este 2022. Pero tampoco el dólar quieto es una inversión atractiva: entre febrero del 2021 y este mes aumentó su precio un 40% (de $150 a $211), también por debajo de la inflación. Distinto es si esos pesos se colocaran en mecanismos de bajo riesgo que rinden mejor que la inflación o si esos dólares se volcasen a un fondo que rindiera en dólares.
La calma cambiaria continuará mientras continúe la calma política: que no haya turbulencias grandes en la aprobación del Congreso a la reestructuración del préstamo con el FMI, que las grandes empresas exportadoras liquiden en los próximos meses la cosecha; y también que no se alteren los mercados por los factores externos: que no se concrete la guerra entre Rusia y la OTAN en Ucrania, y hay que estar atentos que la FED (simil Banco Central de EE.UU.) subirá las tasas de interés en marzo de este 2022 y eso afectará al crédito mundial.